miércoles, 2 de enero de 2008

¿Pensar en mi o en el bienestar de mi familia?

Por un lapso corto de tiempo la idea de emigrar se estaba esfumando, más bien en mi latía fuerte la idea de independizarse ya que actualmente no vivimos solos, aun, creo, no tener claro si quiero emigrar, principalmente por el hecho de saber de que no porque a otros les este yendo bien a mi también tendría que irme bien, y lo hemos visto, varios han vuelto a sus tierras con mucha tristeza y decepción… lo que me produce tranquilidad es que no solo iríamos a que nos fuera bien sino a poder tener una mejor calidad de vida ya que si hablamos de chile específicamente la capital (Santiago) que es donde vivimos, las horas de trabajo son 45 semanales (9 horas diarias), las horas de viaje bordean entre 1 hora a 1 hora 30 min. y el sueldo mínimo es de 145.000, eso hablando laboralmente por otro lado está el problema con el smog y con ello las enfermedades respiratorias en invierno y las alergias en verano y no hay muchos parques públicos lo he comprobado ahora que tengo un hijo y los que hay son realmente deprimentes, en fin no hay muchas opciones de esparcimiento a las cuales ir sino tienes plata. También hay cosas buenas y sobre todo el hecho de que toda mi familia está aquí.




Antes de finalizar el 2007 y comenzar el 2008 hemos conversado primeramente con Dios de los proyectos que tenemos y de su aprobación, Carlos siempre ha tenido la inquietud de conocer nuevos lugares quizás porque su familia vivió esa experiencia, en mi caso no fue así y solo pensé en salir del país para darme unas vacaciones en algún sueño, esto era lejano de mis prioridades y de mi economía… Quisiera empaparme más de esto, de esta idea y de este proyecto…



Finalmente acordamos tomar clases de francés con una amiga, todavía debemos planificar los días de estudio y seguiremos juntando los papeles para el primer envió, pero ya no con la presión de que si o si debemos irnos sino que confiando de que Dios es el que mueve las piezas y haber si resulta o sino nuestra prioridad seria el cambiarnos de casa y quizás hasta de región ya mi esposo en su trabajo tiene la opción de pedir traslado a Valparaíso que es una región ubicada en el borde costero y un poco más tranquila que la capital aunque yo también tendría que comenzar a buscar trabajo por esas zonas…



Quiero desearles a todos un muy feliz año, especialmente a Natalia, Taras y Nicolás ya que comenzó la cuenta regresiva para el inicio de su desafió (Quebec) y quisiera agradecer el apoyo que nos han dado.







4 comentarios:

Desafio Québec: Terry, Naty, Nico y André dijo...

Es una alegria poder compartir con Uds. proyectos, vivencias y sentimientos...

Yo pase y paso por la misma pregunta: y la familia? Son opciones. hoy por hoy optamos por tomar el desafio, ver que pasa.... Después de todo, uno no pierde la familia sino que gana experiencia, amigos y un gran crecimiento personal, espiritual, de pareja, etc.

Claro que esto es muy personal y es muy respetable por lo que estan pasando.
Tomense el tiempo que les haga falta, evaluen aspectos positivos y negativos.
Y no duden que cualquier cosa que necesiten pueden contar con nosotros....

un abrazo enorme

Natalia

Anne dijo...

Hola! vengo por primera vez a tu blog o mas bien al blog de ustedes... luego regreso a leerlo con mas calma.

un beso!
estamos pendientes.

Ale Marge dijo...

Inmigrar es una decisión muy fuerte y puede llegar a ser muy dura, creo que uno debe estar convencido de que puede salir muy bien o no, y cuanto estoy dispuesto yo a pagar por o a ganar por ello.
Muchos dicen: "por lo menos no me quedo con la duda y en todo caso siempre tengo la opción de volver".
Particularmente creo que la aventura vale la pena, sobre todo cuando se es joven y los niños son pequeños, pero me parece muy maduro de vuestra parte de tomarse un tiempo para pensarlo sin tantas presiones.
Saludos
Alejandra

EstebanJ y MaFe dijo...

Hola, es la primera vez que paso por tu Blog, y así como me pasó con Desafío Quebec, me siento identificado... cuando veo las fotos actuales de Nico sonriendo y siendo feliz en Montreal, veo a Mateo allí.

Estamos en el proceso, el cuál es largo, pero te forma en paciencia; el camino es duro, pero te forma en carácter... la recompensa: haberlo vivido para contarlo.